El Dr. Owens ha trabajado con productos de Apple desde que tuvo su primera Macintosh en 1984, y emplea el conjunto completo de dispositivos y software de Apple en sus clases y en el Centro de Recursos de Aprendizaje Jeffers de Tennessee Tech, que él dirige.
“Apple comenzó a trabajar en la educación”, afirma el Dr. Owens. “Al principio, antes del iPhone o del iPad, Apple era la compañía con una computadora que permitía a los profesores llegar más lejos de lo que jamás imaginamos”.
El Dr. Owens ha equipado a cada uno de sus estudiantes con un iPad durante años y utiliza los productos de Apple para enseñarles a imaginar formas diferentes y creativas de acercarse al aprendizaje.
“Si enseñas un proceso mediante una forma única para hacerlo, como lo hacemos a menudo con los niños, todos los resultados serán iguales a lo que has enseñado, y eso sólo atrofia el proceso creativo”, afirma el Dr. Owens. “Yo digo: ‘Quiero que estés libre de filtros a la hora de crear algo’. Los productos de Apple siempre han permitido que profesores y alumnos sean creativos a la hora de aprender”.
Además de usar apps como Keynote, GarageBand y iMovie, el Dr. Owens ha motivado a sus estudiantes a colaborar remotamente durante años. Esto ha incluido trabajar en proyectos desde diferentes lugares del campus, y organizar los horarios de oficina y recibir a profesores invitados de todo el mundo a través de FaceTime.
“Gracias al programa ADE, tengo amigos en todo el mundo. Yo les decía a mis alumnos: ‘Voy a mostrarles cómo será el futuro de la docencia’”, recuerda el Dr. Owens. “Y luego, el primer día de clases, me comunicaba por FaceTime con mis compañeros de ADE en Australia, Nueva Zelanda, Italia, en todo el mundo”.
Cuando el COVID-19 obligó a los campus y escuelas de todo el mundo a aprender a distancia a principios de este año, Tennessee Tech estaba lista, gracias en parte al Dr. Owens, que se ha estado preparando para el futuro durante 40 años.
“El Dr. Owens ha sentado las bases para que seamos tan flexibles como lo hemos sido con el COVID-19”, comenta el Dr. Jason Beach, de 41 años, un profesor de Tennessee Tech que también forma parte del equipo de trabajo de la escuela durante la contingencia. “La pandemia ocurrió tan rápido y varias cosas se detuvieron tan pronto que no fue fácil reunir el equipo necesario, pero gracias a él ya teníamos muchas cosas listas”.